como os anticipaba en la entrada anterior, esta semana ha sido intensa en lo que a volumen de kilómetros se refiere. El plan decía que había que entrenar todos los días de la semana y eso ha facilitado alcanzar, por primera vez en esta preparación, la cifra de 100 kilómetros.
Costó ponerse en marcha el Lunes para el rodaje regenerativo que había
planificado el mister. La exigencia de la media maratón del día anterior
se notaba (isquio y gemelo de la pierna derecha especialmente), pero se
cumplió con el entreno.
La sesión del martes seguía siendo de
recuperación. De nuevo un rodaje a ritmo regenerativo, con la misma
sensación de carga del día anterior. Eso sí, en los kilómetros finales
del entrenamiento ya se notaba mejoría.
En esta semana
postcompeticion no estaba prevista ninguna sesión de calidad. Lo más
parecido fue el entrenamiento del Miércoles, en el que tenía un rodaje
de 10km haciendo la segunda mitad del mismo a ritmo ligeramente superior
al objetivo para la maratón.
El Jueves repito la sesión del
Martes, así que hago el mismo recorrido para comparar. El resultado es
4” más rápido y 2ppm de media menos. La recuperación va viento en popa
:-)
La sesión del Viernes también es un rodaje suave y no demasiado largo, ya que el Sábado la tirada larga tiene 28 kilómetros. El
objetivo es hacerla en progresión, empezando a ritmo muy cómodo y
terminando a ritmo inferior al ritmo de maratón objetivo. Aunque tengo
que apretar un poco los dientes en los últimos kilómetros, completo un
buen entreno de casi 2 horas.
La semana se completa con un nuevo
rodaje regenerativo el Domingo, completamente empapado y helado por el
agua-nieve que estuvo cayendo todo el día. Eso sí, lo disfrute como un niño pequeño.
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Esta próxima semana, también habrá una buena cantidad de kilómetros, pero con un par de días de trabajo de calidad.
Un abrazo.
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